lunes, 19 de enero de 2009

UN MUNDO MEJOR. EROSKI ENSEÑA UN CAMINO

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Eroski ha marcado este fin de semana un hito en la historia cooperativa moderna. En una asamblea de representantes de sus aproximadamente 8.000 cooperativistas (acudieron 500 representantes que previamente recogieron las opiniones y votos de los demás compañeros) celebrada el sábado en Elorrio (municipio donde está la sede social), han decidido dar la aprobación con el 80% de votos favorables al proyecto de cooperativización de aproximadamente 44.000 trabajadores que no eran socios.

El crecimiento de Eroski desde su fundación ha transcurrido por distintas fases, las cuales han sido discutidas o ensalzadas desde muy diversos puntos de vista. La conclusión de esas cuatro décadas y de los distintos esquemas de inversión, organización, compras y colaboración entre los diversos agentes empresariales e institucionales implicados ha sido un conglomerado de sociedades independientes o repartidas en grupos aglutinantes de los cuales Eroski Sociedad Cooperativa era la matriz y la parte mayoritaria en casi todos los casos.

Como consecuencia, repito, se ha llegado a un numero elevado de trabajadores que trabajaban para el Grupo Cooperativo por cuenta ajena, aunque eran evidentes los lazos de colaboración y solidaridad a través de diversos mecanismos, los más importantes de los cuales eran los representativos y su participación en los beneficios de las sociedades a las que pertenecían.

El proyecto de cooperativización presentado al refrendo de la asamblea extraordinaria del sábado pedía la aceptación por parte de los socios actuales para convertir en socios cooperativistas a esos 44.000 trabajadores. Y en una muestra de madurez social, de solidaridad y de respeto por los principios cooperativos, la asamblea dio su aprobación.

No vienen a cuento en este momento los mecanismos temporales y organizativos que se plantean en la propuesta. Podían haber sido otros, mejores o peores. Si alguien tiene interés los podemos discutir en otro artículos. Pero los árboles no deben de ocultarnos el bosque. La lección fundamental está ahí: una parte minoritaria pone en manos de otra absolutamente mayoritaria el fruto de 40 años de sacrificio y esfuerzo (si queremos mirar atrás) y por otra parte acepta (mirando hacia delante) compartir las decisiones y repartir los beneficios futuros con esos trabajadores que les han ayudado a crecer, lo que implicará que la parte que hasta ahora recibían los antiguos socios a cuenta de beneficios se vea muy probablemente reducida (no viene a cuento ahora tampoco el cálculo de en qué proporción).

Con ello han creado la mayor cooperativa del mundo, fruto de una historia en la que el cooperativismo vasco ha sido protagonista de excepción, en la que se han puesto en marcha y modernizado elementos culturales, concepciones del mundo, de la vida, de la sociedad, de la economía y del trabajo que distinguen, entre otros pueblos, también a los vascos. La solidaridad en el trabajo, la democracia participativa son dos pilares fundamentales en la cultura vasca a través de los históricos conceptos del auzolan y de la asamblea uno de cuyos símblos es el árbol de Gernika.

Una de las críticas que se han hecho al plan, entre otras, ha sido que externaliza las decisiones fuera del País Vasco, origen de la cooperativa. En mi opinión, además de que el mecanismo del proyecto prevé la constitución de numerosas cooperativas de base, agrupaciones de segundo grado, etc. que matizan la toma de decisiones globales y locales, hay un principio fundamental que es que las cooperativas, en sentido ideológico e histórico del término, no se organizan para extraer la plusvalía a otros compañeros de trabajo, sino para unir las fuerzas de todos en un riesgo y beneficio comunes desde un principio de igualdad.

Y hoy la economía es mundial. las necesidades son mundiales, los flujos de materiales, mercancías, productos y personas son mundiales y la solución para un mundo mejor es mundial.

En mi opinión es un orgullo ser partícipe, aunque indirectamente, de una aportación desde Euskadi al mundo que puede ser un paso más hacia una economía más solidaria, hacia un reparto de riqueza más equitativo y que pone otra cooperativa más en el mapa de la economía global.

Recuerdo las históricas experiencias de La Rochelle, de Nîmes de algunos otros sitios más. Esta experiencia también estará en la historia del cooperativismo mundial por muchas razones. Eroski ha marcado un camino por un mundo mejor. Enhorabuena. Gracias.