miércoles, 2 de marzo de 2011

El gobierno de Colombia considera el cooperativismo como herramienta para el Desarrollo Nacional

El gobierno de Colombia, a través del Departamento Nacional de Planeación, presentó ante el Congreso de República el documento “Bases del Plan Nacional de Desarrollo 2010 - 2014: Prosperidad para todos”. La última versión de dicho documento contiene importantes referencias al cooperativismo y a las empresas de la economía solidaria, derivados de las observaciones hechas por el propio sector.

En materia de formalización laboral y empresarial, el Plan contempla expresamente que dentro de las reformas al esquema de contratación del país, se considerarán a las cooperativas de trabajo asociado. Asimismo, dentro de los lineamientos estratégicos para brindar mayor acceso a los servicios financieros, el Plan considera que las cooperativas con actividad financiera son un “intermediario financiero importante” y, que por tanto, “continuará apoyando su fortalecimiento estructural”. También serán tenidas en cuenta para el fortalecimiento de las centrales de riesgo.

En la parte relativa al mejoramiento del entorno de los negocios, se hace una referencia al término “empresas”, aclarando que “por empresa se entiende cualquier forma jurídica relacionada con el código de comercio y las formas jurídicas que hacen parte del sector de la economía solidaria”, con lo cual queda claro que toda la política de desarrollo empresarial del Gobierno Nacional, cobija a las cooperativas y empresas de economía solidaria.

En lo que refiere al sector agropecuario, se valora el papel de las empresas de economía solidaria para que los pequeños productores ganen en productividad, capacidad de negociación e inserción en los mercados, al señalar que “el sector economía solidaria es una alternativa de desarrollo empresarial ya que las empresas que conforman dicho sector, al igual que las de naturaleza mercantil, funcionan con criterios de rentabilidad, eficiencia y productividad, a la par que cumplen con estándares contables, financieros, de calidad y de gestión”. El Plan da un valor especial a las formas asociativas como opción para incrementar la competitividad de los pequeños productores agropecuarios y para mejorar la capacidad de generación de ingresos por parte de la población rural.

En cuanto a la minería, el Plan sugiere “evaluar la posibilidad de utilizar esquemas de cooperativismo, con el propósito de mejorar la competitividad de la minería de pequeña escala”, como estrategia para conseguir una minería competitiva, responsable y productiva. Para el sector vivienda, el Plan contempla el fortalecimiento de las entidades solidarias que ofrezcan créditos hipotecarios, destinando parte del Subsidio Familiar de Vivienda a cubrir los costos de otorgamiento y administración, como un instrumento para facilitar el acceso de los hogares de bajo ingreso.

En el capítulo de igualdad de oportunidades para la prosperidad social, se contempla el fomento en la participación de las cooperativas para consolidar la oferta de educación superior, como mecanismo de fortalecimiento de la financiación de la educación. Igualmente, con el fin de fortalecer la red Juntos, para la superación de la pobreza extrema, se contempla dar un impulso a los modelos asociativos para desarrollar el potencial productivo de la población rural, muy en línea con lo contemplado en la locomotora del sector agropecuario. Como respuesta a la ola invernal 2010 - 2011, el Plan contempla que en la Fase de atención, las cooperativas se involucren ofreciendo espacios alternativos para la prestación del servicio de educación.

Finalmente, en el capítulo de soportes transversales de la prosperidad democrática, uno de los lineamientos estratégicos es la construcción de una política nacional de fortalecimiento a expresiones asociativas de la sociedad civil, la cual considerará aspectos como “el fomento a los movimientos de agremiación y federación de expresiones asociativas con el propósito principal de generar canales de interlocución en temas de política pública priorizados”, y, “el apoyo a las empresas del sector de la economía solidaria ratificando su carácter empresarial, social y solidario y, reconociendo su potencial para generar prosperidad entre sus asociados y a nivel comunitario”.

Como se aprecia, el sector cooperativo y las empresas de economía solidaria son reconocidos dentro del Plan como actores de primera línea para la consecución de avances en diversos temas, ligados a los principales problemas sociales del país como son la generación de ingresos o el acceso a los servicios financieros. Estas referencias deben ser aprovechadas por las empresas cooperativas para la elaboración de proyectos, de manera que cada día el sector gane en visibilidad y reconocimiento como alternativa de desarrollo para el país.

Fuente: CONFECOOP

No hay comentarios: