miércoles, 4 de noviembre de 2009

Según el presidente de CEPES, «La Economía Social no está en la agenda del Gobierno»


Con el país aún en plena recesión, las empresas de Economía Social reivindican su papel como generadoras de empleo y elemento integrador de la sociedad. Por eso, para el presidente de su confederación (CEPES), Juan Antonio Pedreño, el Gobierno debería hacerles bastante más caso.

-En estos momentos de crisis, ¿qué aportan las empresas de Economía Social al país?
-Hablamos de cooperativas, mutualidades, fundaciones, sociedades laborales, empresas de inserción, centros especiales de empleo, empresas del sector de la discapacidad y cofradías de pescadores. Compañías competitivas, generadoras de empleo y, en muchos casos, líderes en sus sectores, que tienen un compromiso total y absoluto con su territorio. Empresas que no se deslocalizan y, por tanto, no provocan grandes vacíos de empleo ni contemplan expedientes de regulación por su compromiso con la creación de puestos de trabajo, y porque responden a criterios de solidaridad, de igualdad, de valores democráticos y generadores de riqueza colectiva.

-¿Y qué tendrían que hacer para que se las considerara más?
-Ya están haciendo mucho en estos momentos, pero parece que el Gobierno no está alcanzando a medir el grado de compromiso de todas y cada una de las personas que están en estas empresas y que adoptan decisiones difíciles, como reinvertir los excedentes si los hubiere, reducir los sueldos, renunciar a pagas extraordinarias, aportar capital a sus empresas o contribuir a la cohesión social, la innovación social y el desarrollo local y sostenible. Todo con el objetivo de que se mantengan los puestos de trabajo. Nosotros tenemos vocación de reconciliar la economía y la sociedad. Por eso, desde CEPES reafirmamos de forma constante nuestro papel de interlocutor, de defensa y de impulso de esta otra forma de hacer empresa, cada vez más imprescindible en la sociedad.

-¿Por qué cree que el Gobierno no les trata como merecerían?
-Una cosa son las palabras y otra los hechos. Ni los datos cuantitativos de empresas ni de empleos que representamos, ni los valores y compromisos que asumimos y trasladamos, están sirviendo de aval para que de forma abierta y valiente se nos reciba y se nos reconozca. Sencillamente, no estamos en la agenda del Gobierno.

-Pero, ¿qué propuestas han realizado a la Administración?
-Fuimos de las primeras organizaciones que realizaron propuestas para hacer frente a la crisis, y hace apenas un mes, volvimos a hacer una nueva recopilación de medidas, que van desde un plan integral de desarrollo y fomento de la Economía Social a la aplicabilidad inmediata a las cooperativas de la reducción fiscal propuesta de cinco puntos en el Impuesto de Sociedades, pasando por potenciar el desarrollo de empresas de Economía Social en sectores emergentes e intensivos en creación de empleo, como la dependencia o la educación. También hay que potenciar la I+D+i, sin olvidar la necesidad de apoyar una política de incentivos a la inversión en estas empresas, generadoras de empleo estable.

-¿Son optimistas ante la respuesta que puedan recibir?
-Nos gustaría serlo. Creemos que de llevarse a la práctica, muchas de nuestras propuestas contribuirían a mantener bastantes puestos de trabajo y también, posiblemente, a crear otros miles. CEPES está demostrando ser un aliado estratégico importantísimo ante esta situación de crisis, y está contribuyendo a que en Europa sea más reconocida la Economía Social. Ahora hay una oportunidad magnífica para, aprovechando la presidencia española de la Unión Europea y la Conferencia Europea de Economía Social en Toledo, el Gobierno se convierta en el referente europeo de este modelo de empresas.

Fuente: Diario Montañés

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